Elecciones en Estados Unidos en plena batalla: ¿Quién ganará, Harris o Trump?

Recientemente, la contienda por las elecciones presidenciales en Estados Unidos se ha intensificado. El 10 de septiembre, los dos principales candidatos se enfrentaron por primera vez en un debate, lo que podría ser el único enfrentamiento directo antes de las elecciones. El mercado en general considera que Harris superó las expectativas en el debate, mientras que Trump pareció un poco plano.

Después del debate, el mercado de apuestas reaccionó rápidamente. En solo dos horas, el precio del contrato de elección de Harris subió de 53 dólares a 57 dólares, mientras que el de Trump bajó de 52 dólares a 47 dólares, ampliando la diferencia. Este cambio refleja que más personas ven con optimismo la posibilidad de que Harris gane.

En el debate, Harris se destacó en varios temas. Demostró comprensión hacia las votantes femeninas en el tema del aborto, compartió experiencias personales sobre cuestiones raciales y enfatizó planes de desarrollo futuro, transmitiendo un mensaje de esperanza para impulsar el cambio. En comparación, Trump se centró principalmente en temas como la inmigración ilegal, la política arancelaria y el suministro de energía fósil, y su discurso careció de innovación, lo que podría dificultar atraer a los votantes independientes.

Luego, Harris invitó a Trump a otro debate televisivo en las redes sociales, con la esperanza de ganar más votos.

Sin embargo, el 24 de septiembre, la oficina de campaña de Harris en Arizona fue objeto de un tiroteo. La policía investigó y determinó que se trataba de un posible delito contra la propiedad. Para este evento, el mercado presentó dos interpretaciones: una sostiene que es una acción de represalia de los partidarios de Trump, mientras que la otra sospecha que el equipo de Harris lo organizó para desviar la atención pública.

En términos de financiamiento de campaña, Harris muestra una clara ventaja. Según los últimos documentos de informes federales, el gasto diario promedio del equipo de Harris en agosto alcanzó los 7.5 millones de dólares, mientras que el equipo de Trump fue de 2.6 millones de dólares. En recaudación de fondos, el equipo de Harris recaudó un total de 361 millones de dólares en agosto junto con el Partido Demócrata, sumando un total de 404 millones de dólares. En comparación, el equipo de Trump recaudó solo 130 millones de dólares en el mismo período, con donaciones de comités de acción política, alcanzando un total de 295 millones de dólares.

La múltiple identidad de Harris le ha ganado un amplio apoyo. Es de una familia inmigrante de minorías, al mismo tiempo que cuenta con una educación de prestigiosas universidades y una amplia experiencia en la práctica del derecho. Sin embargo, su carrera política también ha estado marcada por controversias, incluidas algunas decisiones tomadas durante su tiempo como fiscal y las críticas generadas por sus estrategias de campaña.

Actualmente, Harris lidera ligeramente a Trump en las encuestas con un 1.6%. En los votos electorales ya determinados, Harris tiene aproximadamente 226 votos, mientras que Trump tiene alrededor de 219. Para ganar, Harris necesita 44 votos electorales más, mientras que Trump necesita 51.

Las propuestas de política de los dos candidatos presentan diferencias claras. Harris tiende a subsidiar a los residentes a través de la expansión fiscal, lo que podría resultar en un aumento de la emisión de deuda a corto plazo, lo que es desfavorable para los activos de bonos, pero podría respaldar al dólar. Su política de aumento de impuestos podría ejercer presión sobre el mercado de valores estadounidense. Las políticas de Trump son relativamente favorables para el mercado de valores estadounidense, los productos cíclicos y las criptomonedas, pero podrían tener un impacto de intervención en el dólar.

En los próximos dos meses, la situación electoral seguirá siendo incierta. Estados Unidos utiliza el "sistema del colegio electoral", por lo que el candidato con más votos populares no necesariamente será elegido. Según las encuestas de apoyo en los estados actuales, la competencia en los estados indecisos es más intensa que en años anteriores. El resultado de las elecciones aún está por verse.